jueves, 13 de mayo de 2010

IMÁGENES DISTORSIONADAS Y ABERRACIONES SOCIALES INDUCIDAS - ¿QUIÉN PAGA EL PATO DE ESTA FIESTA?


El escenario
Una carga de profundidad al Estado de Bienestar
César González-Calero

LA NACION
Noticias de Exterior: Jueves 13 de mayo de 2010 | Publicado en edición impresa

Poco antes de ganar las elecciones en 2004, José Luis Rodríguez Zapatero fue traicionado por uno de esos micrófonos abiertos a destiempo que revelan más sobre el carácter de los políticos que mil discursos. En un acto público, un asesor económico del PSOE le susurró al inmaduro candidato socialista que "en dos tardes" le explicaría los conceptos económicos básicos que necesitaba saber. Eran tiempos de prosperidad en España y seguramente Zapatero nunca preguntó en esas dos clases cómo tendría que gestionar una crisis económica de las que no se olvidan.

En los seis años que lleva en el poder, Zapatero ha repetido hasta la saciedad que el gasto social en España era intocable. Tal vez por eso, cuando el mandatario anunció ayer en el Congreso el ajuste económico más contundente en la historia reciente de España tenía el rostro desencajado. Urgido por las malas noticias que llegan desde Grecia, con el aliento de los especuladores en la nuca, presionado por Bruselas y hasta por Barack Obama, Zapatero sacó la tijera y cortó por donde más duele: un recorte para este año del 5% en el salario de 2,6 millones de trabajadores públicos, un paso que ningún presidente se había atrevido a dar desde el retorno de la democracia a España, a mediados de los años 70.

En el paquete de nueve medidas anunciado por Zapatero, los empleados públicos comparten penas con los seis millones de pensionados que verán congelada su paga en 2011. Con los recortes añadidos en gasto sanitario y en inversión pública, principalmente, el gobierno socialista pretende ahorrar unos 15.000 millones de euros para ir reduciendo el abultado déficit público (11,2% del PBI) hasta alcanzar el 3% que recomienda Bruselas en 2013. Pero si lo logra, será a costa de haber lanzado una auténtica carga de profundidad contra el ya devaluado Estado de Bienestar español.

El ajuste programado por Zapatero -y bendecido por la Unión Europea, el FMI y los mercados- puede jugarle a mediano plazo una mala pasada. Hábilmente, el líder socialista ha esperado a que España dejara atrás la senda de la recesión (el PBI creció un 0,1% en el primer trimestre del año) para anunciar los recortes sociales. A su vez, el desempleo parece haber tocado techo (con 4,6 millones de personas, el 20% de la población activa, se trata en todo caso de un techo estratosférico). Pero al mismo tiempo, la credibilidad de Zapatero anda muy cerca del suelo. Según la última encuesta del estatal Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), el 75% de los españoles tiene "poca o ninguna" confianza en su presidente, y un 52% considera que su gestión es "mala o muy mala".

Los sindicatos -fieles aliados hasta ahora de la política de Zapatero- ya han advertido que la luna de miel con el gobierno pasará a mejor vida, aunque no desenterrarán el hacha de guerra. Hace tiempo que han perdido capacidad de movilización, y aunque organizarán marchas contra los recortes sociales, por el momento no se plantean convocar una huelga general, un arma política que los sindicatos utilizaron en dos ocasiones contra la política social de los gobiernos socialistas de Felipe González, y en una ocasión (2002) contra el gobierno derechista de Aznar, en protesta por la reforma del mercado laboral impulsada por el Partido Popular.

Acostumbrados a años de bonanza económica, los españoles se toparon con la crisis financiera internacional sin que nadie -empezando por el propio Zapatero- quisiera ver la amenaza que representaba para una economía que se asentaba sobre cimientos de arcilla. El dinero barato y el descontrolado negocio inmobiliario alimentaron una burbuja a la que algunos llamaron, con una ceguera absoluta, el "milagro económico español". Al calor del ladrillo, la corrupción se instaló en una sociedad gangrenada por la cultura del "pelotazo" (ganar dinero a toda costa con el menor esfuerzo posible), esa cultura que con tanta alegría cultivó Felipe González y con más esmero, si cabe, propagó Aznar cuando liberalizó el suelo urbanizable en la segunda mitad de los años 90.

Para desgracia de Zapatero, falta apenas un año para que se celebren elecciones locales en el país. Un año, 2011, en el que varios millones de funcionarios y pensionados tendrán congelados sus ingresos y otros tantos millones de españoles seguirán haciendo fila en las oficinas del Instituto Nacional de Empleo.

Pero no todas son malas noticias para el presidente español. El PSOE pagará una factura política por su deficiente gestión de la crisis, pero enfrente tiene a un partido, el PP, embarrado en varios escándalos de corrupción de gran calado, y de cuyo líder, Mariano Rajoy, desconfían, según la encuesta del CIS, el 82% de los españoles y algún que otro destacado dirigente de su propio partido.


abrir aquí:
El escenarioUna carga de profundidad al Estado de Bienestar

César González-Calero

lanacion.com | Exterior | Jueves 13 de mayo de 2010




II
Temblor financiero en la UE / Los países del bloque aplican recortes rigurosos
Llegó en Europa la hora de la austeridad

Noticias de Exterior: Jueves 13 de mayo de 2010 | Publicado en edición impresa
Luisa Corradini
Corresponsal en Francia


PARIS.- De Grecia a España, pasando por Gran Bretaña, Francia y Portugal, la mayoría de los países europeos están adoptando, o se aprestan a hacerlo, implacables medidas de austeridad para combatir los déficits y reducir la deuda, dos flagelos económicos que amenazan con hundir la estabilidad europea y poner en peligro el futuro del euro.

"La crisis actual de la deuda europea planea como una espada de Damocles sobre la coyuntura económica planetaria", resumió Christian Lips, economista del banco Nord LB.

Grecia, aplastada por sus deudas, necesitó una ayuda internacional -hasta ahora sin precedente en Europa- para resistir a la profunda crisis de confianza de los mercados. Y el cáncer griego se extendió como una metástasis al resto de la eurozona. Para salir de ese pantano, tras haber decidido un histórico blindaje de 750.000 millones de euros, todos prometieron el pasado fin de semana reducir drásticamente sus déficits.

Los 16 países de la eurozona acaban de vivir la peor recesión de los últimos 60 años. Los anémicos resultados del primer trimestre de este año, anunciados ayer en Alemania, Francia y España, presagian sombrías perspectivas para el resto del año.

Después de Grecia, Portugal y España, considerados los eslabones débiles, también Francia y Alemania anunciaron las primeras medidas de saneamiento, en algunos casos en dosis extremadamente dolorosas.

Congelamiento de salarios y gasto público, reducción de ayudas al desarrollo y a los sectores sociales más desfavorecidos, aumento de impuestos, prolongación de la duración de cotizaciones para poder jubilarse? La austeridad es necesaria para poner en orden las finanzas, pero, sumada al elevado desempleo, puede tener efectos nefastos en el consumo.

"El impacto será terrible. La incipiente reactivación no durará mucho", advierte Bertrand Don, profesor de la universidad francesa de Aix-en-Provence.

Grecia sufrió un retroceso del PBI de 0,8% en el primer trimestre. Con las durísimas medidas anunciadas ayer por José Luis Rodríguez Zapatero (ver aparte), España podría volver a caer en recesión, según las previsiones del gobierno, que espera este año que la economía caiga un 0,3%.

Si bien hasta ahora Italia resistió la crisis, el gobierno anticipó su intención de ajustar un poco más el cinturón. La deuda pública italiana alcanza a 118,4% del PBI.

En una situación igualmente frágil, Irlanda, primer país de la eurozona que entró en recesión, ha tomado medidas de rigor desde 2008, reforzadas dos veces el año pasado. Entre un catálogo muy impopular, el gobierno redujo beneficios sociales y bajó entre un 5% y 10% el salario público. Lo mismo hizo Hungría, donde ya el gobierno precedente había adoptado medidas de austeridad desde 2008.

Incluso los países considerados más sólidos se han visto obligados a transitar el camino del rigor. Desde septiembre pasado, Holanda anunció una reducción del 20% de sus gastos públicos a partir de 2011. Finlanda y Dinamarca se preparan igualmente para someterse a la dieta griega.

La mejor evidencia de los tiempos que vienen la dio el nuevo líder británico David Cameron, que en su primer día de gobierno anunció la necesidad inevitable de reducir el déficit público: se propone recortar 6000 millones de libras este año.

Luxemburgo, uno de los países más ricos de Europa por habitante, anunció esta semana que adoptará estrictas medidas de austeridad.

En cuanto a Alemania, que junto a Francia goza de la mejor nota para conseguir dinero en los mercados, no adoptó un plan de austeridad, pero Angela Merkel acaba de renunciar a reducir la carga fiscal, una de sus principales promesas electorales.

En Francia, el presidente Nicolas Sarkozy prometió bajar el enorme déficit del 8% actual a 3% en 2013. Esa pretensión, que implica ahorrar unos 95.000 millones de euros en tres años, es considerada por los economistas prácticamente inalcanzable.

Escaldada por el accionar de Grecia, que había ocultado el verdadero déficit a sus socios de la UE, la Comisión Europea propuso ayer que a partir de 2011 cada país le informe los proyectos de presupuesto antes que a los parlamentos nacionales.

Adoptado en 1997, el Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PSC) limita el déficit de los países de la eurozona a 3% del PBI y la deuda, a 60%. Actualmente, 13 de los 16 países de la zona euro fueron advertidos por la UE por sus déficits excesivos.

¿Bastarán esos esfuerzos? Ningún economista descarta que se repitan los ataques especulativos. "Los mercados querrán saber cuán sólida es la determinación europea. En las próximas semanas podríamos ver jaqueado a algún país importante", estimó el francés Daniel Cohen, que señaló como ejemplo "a Gran Bretaña".


abrir aquí:
Temblor financiero en la UE / Los países del bloque aplican recortes rigurososLlegó en Europa la hora de la austeridad
lanacion.com | Exterior | Jueves 13 de mayo de 2010





Los rostros sombríos de José Luis Rodríguez Zapatero y la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, en el Parlamento
Foto: Reuters

III
La crisis financiera en Europa
Presionado, Zapatero anunció un fuerte ajuste en España
Procura ahorrar unos 15.000 millones de euros

Noticias de Exterior: Jueves 13 de mayo de 2010 | Publicado en edición impresa
Adrián Sack
Para LA NACION


MADRID.? El temor a caer en el mismo abismo que Grecia y las crecientes presiones de los mercados internos y externos para que se cambie el rumbo de la economía resultaron demasiado poderosas para un hasta ahora obstinado José Luis Rodríguez Zapatero.

Tras haberse negado en sus seis años de gobierno a reducir el gasto público y a poner en peligro el apoyo de las centrales sindicales a su gestión, el presidente del gobierno español anunció ayer la aplicación de un drástico "tijeretazo" en los presupuestos del Estado con el fin de ahorrar 15.000 millones de euros e intentar, así, evitar el hasta ayer casi seguro camino al colapso de la economía de su país.

Sin embargo, el "golpe de timón" anunciado ayer en el Congreso no será fácil de digerir para quienes hasta ahora habían apoyado al mandatario socialista por su apasionada defensa de la poderosa red de contención social que posee hoy España. Especialmente, porque la tijera pasará por primera vez en la historia por los sueldos de los empleados públicos y los haberes de los jubilados, hasta este martes dos de los sectores más reivindicados por el discurso oficialista.

En su mensaje ante el Congreso, difundido apenas unas horas después de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, le recomendara en una llamada por teléfono a su par español "medidas urgentes" para reducir el déficit público, Zapatero anunció un "recorte promedio" del 5% en las remuneraciones y pensiones del sector estatal.

Video: Rodríguez Zapatero anunció fuertes recortes al gasto público (C5N)

Esta reducción generalizada de salarios, que fue calificada de "ajuste a la griega" por más de un medio local, será aplicada en forma paulatina a lo largo de 2010 y será seguida por un congelamiento de los haberes el año próximo.

A través de esta medida, sin dudas la más resonante y controvertida del paquete de reducción del gasto público, el gobierno pretende conseguir un ahorro de 3900 millones de euros.

Pero el mayor recorte lo padecerá la inversión pública, que actualmente está a cargo del Ministerio de Fomento.

Esta cartera, a la que se le había asignado la función de incentivar la reactivación de la economía a través de la realización de obras públicas, verá mermadas sus arcas en 6045 millones de euros, lo que supone un verdadero golpe a uno de los medios más concretos y visibles para la salida de la crisis.

Además, se contemplan reducciones significativas en el área de sanidad (1300 millones) y de fondos asignados a las comunidades y municipalidades (1200 millones), aunque el "tijeretazo" más comentado por estas horas tiene que ver con la supresión del llamado "cheque bebe".

Este beneficio, que había sido implementado cuando Zapatero aún no había completado su primer mandato, fue considerado en su momento una "medida estrella" para fomentar la natalidad a través del pago de 2500 euros a los padres de cada recién nacido y, al mismo tiempo, un recurso proselitista para promocionar la reelección del presidente, que finalmente obtendría al año siguiente.

Pero ayer, el "cheque bebe" pasó a ser un recuerdo de épocas mejores, junto con la intención presidencial de evitar todo tipo de ajuste social y, por lo tanto, de prevenir que la alarmante tasa de desempleo, hoy del 20,05%, generara un ejército de "parados" en estado de movilización.

Por esta razón, los primeros en protestar por este cambio de dirección en la política económica fueron los sindicatos.

Cándido Méndez, titular de la Unión General de Trabajadores -una entidad generalmente afín a las políticas de la actual administración socialista-, advirtió sobre una "quiebra del discurso político" de Zapatero y afirmó que ve "muy difícil" que se pueda mantener el diálogo con el gobierno debido al "conflicto social" que prevé después del plan de ajuste.

También el secretario de las Centrales Obreras, Ignacio Fernández Toxo, tildó de "injusto" y "antieconómico" el anuncio gubernamental y no descartó "protestas masivas" en caso de que el paquete de medidas sea aprobado mañana por el Consejo de Ministros.

Más lejos fue Cayo Lara, el líder de Izquierda Unida (IU), una agrupación política con fuerte raigambre gremial, que señaló que el presidente "ha pasado una raya roja", al tomar decisiones que son "impropias de un gobierno que se llama socialista".

En ese partido, así como en algunos sindicatos, se barajaba ayer la posibilidad de convocar, incluso, a una huelga general. Esta medida de fuerza no se lleva a cabo desde 2002, cuando los sindicatos protestaron contra la intención del gobierno de centroderecha de José María Aznar de modificar aspectos básicos del sistema laboral y las prestaciones por desempleo.

Ironías de Rajoy
Tampoco el Partido Popular (PP) aprobó el plan oficial, a pesar de que su conducción solicitó en numerosas oportunidades una drástica reducción del gasto público.

En la tarde del miércoles más agitado de los últimos meses, el líder de esa fuerza política, Mariano Rajoy, acusó a Zapatero de efectuar "un gran recorte de derechos sociales" que "pagarán todos los españoles".

Con una alta dosis de oportunismo e ironía, el líder del PP afirmó que el ajuste "no hubiese ocurrido" si el presidente "hubiese actuado a tiempo" y hubiese seguido las indicaciones de ese partido.

En tanto, anoche el Fondo Monetario Internacional y el comisionado de la Unión Europea respaldaron públicamente el plan impulsado por el gobierno español.

LOS PRINCIPALES PUNTOS DEL PLAN

Salarios públicos: habrá una reducción del 5%, en promedio para 2010 y un congelamiento para todo 2011. Se baja el sueldo un 15% a los miembros del gobierno.


Inversión pública: se prevé una reducción de 6045 millones de euros en 2010 y en 2011.


Jubilaciones y subsidios: se suspende en 2011 la revalorización de las pensiones, excluyendo las mínimas. Se elimina el "cheque bebe" de 2500 euros a partir del 1° de enero de 2011.


Ayuda al desarrollo: se reducen en 600 millones de euros entre 2010 y 2012.


Salud pública: reducción y racionamiento de los medicamentos para alcanzar un consumo más eficiente y vinculado con las necesidades reales de los pacientes, de acuerdo con las indicaciones de la comunidad científica. Dispensación de medicamentos en unidosis, mediante el fraccionamiento de los envases.


Ahorro: con estas medidas, el gobierno español ahorraría unos 5000 millones de euros en 2010 y otros 10.000 millones en 2011.


Impuestos: Zapatero no descartó ayer nuevas medidas fiscales que incluirían la suba de los impuestos a la renta.


abrir aquí:
La crisis financiera en EuropaPresionado, Zapatero anunció un fuerte ajuste en España

Procura ahorrar unos 15.000 millones de euros

lanacion.com | Exterior | Jueves 13 de mayo de 2010


el dispreciau dice: mientras los medios entretienen al mundo con la utopía del desarme, o bien se refieren a la entelequia del terrorismo fabricado por los amigos del poder, el mundo real cursa otra dimensión destructiva, mucho peor que un desastre nuclear y más nefasto que un atentado terrorista... Permanezco en la idea que la clase política mundial vigente por estas horas es el mejor reflejo del terrorismo de estado, esto es que sus incapacidades, impericias, negligencias, obsecuencias, atropellos, e ignorancias, arrasan con las sociedades bajo sus pies, siempre bajo el argumento de futuros "tiempos mejores" que no son otra cosa que una mentira disfrazada de zanahoria que jamás será alcanzada... imagen propia de empresarios a los que el nombre de "empresarios" les queda demasiado grande en sus espaldas. El efecto dominó cursa con violencia hacia adelante y los más vulnerables (también por inducción) vuelan por el aire al modo de una casucha atropellada por un huracán [ver imagen superior]. Le toca a Grecia, a Portugal, a España, quizás a algún otro tal como antes fue, se salva la coyuntura y la sociedad humana de cualquiera de dichas naciones u otras se ve afectada por efectos que nunca promovió, por los que nunca hizo nada, sin embargo los mismos (efectos) caen sobre ellos al modo de un artefacto nuclear, dejándolos mentalmente bloqueados, atónitos ante tanta barbarie. Curiosamente, el mayor responsable de fabricar deuda política de cualquier clase y factor, y de fabricar deuda económica social o de cualquier otra índole, goza de buena salud y hasta tiene la capacidad de regalarla a efectos de implantarla en el destino estratégico que más le conviene... me pregunto entonces, ¿quién hace terrorismo?... La sociedad humana está harta (globalización mediante) de este modelo de consumir almas, consumir ilusiones, destruir esperanzas, pulverizar futuros, tergiversar finalidades, y otras tantas yerbas, en nombre del libre comercio, del libre albedrío, de la economía de mercado, de las economías a escala, de democracias mentidas, o de reinos relucientes, así como otros actos de barbarie política y empresaria que se transforman en vectores de pandemias de estrés y cardiopatías, tanto como de muertes por depresión de víctimas inocentes, personas que estaban en sus casas y de pronto se enteran por televisión que sus vidas ya no le pertenecen. Esto es algo semejante a padecer las consecuencias funestas de una fiesta que viven otros... ellos bebieron, ellos consumieron drogas, ellos ejercieron actos de violación y posteriores asesinatos, pero los culpables son aquellos que ni siquiera sabían que la fiesta estaba sucediendo. Indudablemente el trompo (así veo el mundo actual) está camino a desencadenar su última vuelta y posterior caída, inevitables. El pato lo pagan las víctimas propiciatorias que indica que dueño de la fiesta y a decir verdad, este modelo injusto y despreciable, no da para más. El planeta está sacudido por la depredación de sus recursos, todo está contaminado al tiempo que los genios hablan de resolver el problema en el 2050... junto con ello el sistema económico mundial ha quebrado sin que ninguno de esos mismos genios estén dispuestos a aceptarlo y asumir sus miserias (que las tienen y en grado significativo) y responsabilidades... lo que está sucediendo en el mundo amerita que los responsables (sean quiénes sean... y todos sabemos quiénes son) sean juzgados por delitos de lesa humanidad ya que entre esta situación y un genocidio, no hay diferencia alguna. Mayo 13, 2010.-

No hay comentarios: