jueves, 5 de agosto de 2010

VERGÜENZA NACIONAL - EL PRECIO SOCIAL POR PROTEGER A LA DELINCUENCIA


"El banco se cargó la vida de un bebe", dijo el hermano de la mujer baleada
Isidro, el hijo de la mujer baleada en una salidera bancaria en La Plata, falleció este mediodía; "Esperamos que sirva para que cambie algo", dijo el tío; además, fue imputado el cajero que había atendido a la víctima; en diálogo con lanacion.com el abogado de la familia insistió en la responsabilidad de la entidad bancaria


Noticias de Información general: Jueves 5 de agosto de 2010 | 12:29 (actualizado a las 16:32)

Foto: DyN
El bebe de la mujer que fue baleada en una salidera bancaria en La Plata el pasado jueves, falleció este mediodía. Según informaron desde el hospital, el niño, que había nacido tras una cesárea de emergencia, sufrió un paro cardiorespiratorio alrededor de las 13 de hoy.

Se trata de Isidro, el hijo de Carolina Píparo, quien había sido herida de bala al salir de una sucursal del banco Santander Río en La Plata.Carolina continúa internada.

"El banco se cargó con la vida de un bebe. Esperamos que se sepa quién fue cómplice dentro de la entidad porque esta movida no se arma así no mas, y si se armó fácilmente, hay negligencia por la falta de seguridad", dijo Matías, el hermano de la mujer, tras la noticia.


Video: «Que la muerte de Isidro sirva para algo», dijo su tío (TN)


"Los médicos nos habían anticipado que era un cuadro muy complicado y el bebe estaba en manos de Dios", señaló y agregó que Carolina todavía no se enteró del fallecimiento del niño.

"Estamos esperando el cambio de carátula para incluir el homicidio. Seguramente es lo que va a hacer el fiscal ahora", dijo a lanacion.com Gustavo Galasso, uno de los abogados de la familia Píparo.

El ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, dispuso un día de duelo institucional y ordenó izar la bandera a media asta en todas las dependencias de la cartera, en la que también trabajaba Carolina Píparo.

Imputan al cajero. El cajero que había atendido a Carolina fue imputado hoy en la causa, según confirmó el fiscal Marcelo Romero.

El hombre está sospechado de cómplice de la banda que asaltó brutalmente a la mujer, a partir de las declaración testimonial de la madre y el marido de la víctima. Píparo le había dicho a su esposo que sospechaba del empleado que, un día antes del episodio, se había negado a darle el dinero al decir que no contaba con la suma requerida.

En diálogo con el canal Todo Noticias, Romero indicó que el sospechoso ya fue notificado. El funcionario precisó que la medida fue tomada ayer y agregó que el empleado de la entidad será sometido a declaración indagatoria en las próximas horas.

"Para nosotros es un hecho bastante raro que una sucursal no tenga 80 mil pesos y haga que el cliente vuelva al día siguiente a retirar el dinero", dijo Galasso.

"Existe una responsabilidad del banco. De hecho, hay un antecedente en un fallo de Casación que responsabilizó a una entidad por un hecho similar", agregó y especificó que se trata de una denuncia de un cliente al que le falsificaron la firma y le extrajeron dinero de su cuenta.

"El banco hizo un acuerdo económico con la víctima. Lo que estamos investigando es si esa persona sigue trabajando en esa entidad", indicó Galasso.


Audio: Fabián Améndola, uno de los abogados de Carolina (TN)


"Acá hay personajes adentro de la entidad que son peores que quienes le pegaron el tiro a Carolina", declaró hoy Matías.


Video: el cajero del banco, posible cómplice (TN)


En tanto, la Justicia había ordenado esta semana la captura nacional e internacional de Miguel Angel Silva, alias "Pimienta", acusado de integrar la banda que atacó a la mujer y señalado como "marcador" adentro de la sucursal.

La medida fue dictada por el juez de Garantías de La Plata César Melazo a raíz de las filmaciones de las cámaras de seguridad de la entidad bancaria y así fue cómo se identificó al sospechoso, que sigue prófugo.

Carolina sigue internada en terapia intensiva en el hospital en el Hospital San Roque, de Gonnet. El director del centro asistencial, Daniel Angeleri había informado esta mañana que la mujer continuaba con respiracion mecánica asistida y con pronostico reservado, aunque hermodinámicamente estable.

Duelo y preocupación en los bancos. A raíz del fallecimiento del bebe, la Asociación Bancaria planea disponer para mañana Día de duelo bancario.

El secretario de prensa del gremio bancario, Eduardo Berrozpe, anunció que "la Asociación Bancaria va a solicitar la remoción de todos los responsables del área de seguridad del Banco Central y la investigación de las eventuales responsabilidades de sus directores".

Asimismo, informó que hoy la conducción del gremio se reuniría en la ciudad de La Plata, con el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, para hablar de los problemas de inseguridad en los bancos.

El violento hecho. El episodio comenzó el pasado miércoles, cuando Píparo se dirigió a la sucursal situada en la avenida 7 y calle 41, en el centro platense, para retirar 10.000 dólares y 10.000 pesos, que junto con su marido, Juan Ignacio Buzzali, iban a utilizar para señar la compra de una vivienda.

Pero el cajero le dijo que no había tanto dinero en la sucursal y le pidió que volviera ayer, para poder hacer el retiro.

Una vez hecha la transacción el día jueves, cuando regresaba a la casa de su madre en su auto un ladrón que circulaba con otro en moto la interceptó y tras exigirle la entrega del dinero la golpeó en la cabeza y le pegó un tiro.

La bala entró por la boca, salió por el mentón y se metió de nuevo en su cuerpo por el pecho, hasta quedar alojada en la parte superior del abdomen.

Los delincuentes huyeron con el dinero y Piparo fue trasladada de urgencia al hospital San Roque, de Gonnet. Allí, los médicos lograron salvarle la vida, gracias a una cesárea de emergencia.

"El banco se cargó la vida de un bebe", dijo el hermano de la mujer baleada

Isidro, el hijo de la mujer baleada en una salidera bancaria en La Plata, falleció este mediodía; "Esperamos que sirva para que cambie algo", dijo el tío; además, fue imputado el cajero que había atendido a la víctima; en diálogo con

lanacion.com | Información general | Jueves 5 de agosto de 2010




Violentas salideras bancarias / Familias dedicadas al delito
Cómo operaba la banda que atacó a la mujer embarazada en La Plata
La pareja de un ladrón controlaba, por los diarios, el botín denunciado en los robos; otro detenido

Noticias de Información general: Domingo 1 de agosto de 2010 | Publicado en edición impresa
Gustavo Carabajal
LA NACION


La mujer de uno de los integrantes de la banda que atacó a Carolina Piparo coleccionaba los recortes de diarios en los que se publicaban los asaltos cometidos por el grupo delictivo que integraba su esposo, quien gozaba del beneficio de la prisión preventiva morigerada que le otorgó un juzgado de Tres Arroyos, donde había sido detenido por cometer varias salideras bancarias.

Este sospechoso, que habría sido identificado como Leonel Luciano López, fue detenido anoche, minutos después de las 21.30, en Dock Sud.

Además, una serie de elementos hallados por los investigadores del ataque contra la mujer embarazada pusieron al descubierto que la banda actuaba con estructura familiar, en la que las esposas de aquellos que salían armados a robar y sus hijos cumplían distintas funciones.

Cuando fue detenida, cuatro horas después de que su marido le disparó un balazo a Piparo, la imputada llevaba en una media 12.000 dólares y 2000 pesos que su esposo le quitó a la mujer embarazada, que había retirado el dinero de una sucursal del banco Santander Río, en La Plata.

Según informaron fuentes judiciales y policiales, si bien la imputada no participó directamente del violento asalto contra Piparo, fue acusada de encubrimiento, debido a que tenía en su poder parte del dinero que le robaron a la mujer embarazada.

Para entender cómo funciona el grupo delictivo que baleó a la mujer embarazada ?lo que obligó a que le practicaran una cesárea de urgencia para salvar al bebe?, se podría comenzar con los perfiles de los cuatro sospechosos que fueron detenidos hasta el momento.

Por ejemplo, la esposa del sospechoso que habría sido identificado por la policía como Juan Manuel Calvimonte se encargaba de guardar parte del dinero robado en las salideras bancarias. También se encargaba de conseguir los teléfonos celulares y los chips que eran utilizados por el "marcador" que entraba en el banco para elegir a la víctima que retiraba una importante suma de dinero y señalarla a sus cómplices, que la esperaban fuera del banco, la seguían a bordo de una moto y la asaltaban.

También ella se ocupó de guardar la moto con la que su marido, junto con Calvimonte y Carlos Emanuel Burgos, siguieron a Piparo desde el banco, situado en la esquina de 7 y 41, hasta la casa de la mujer embarazada, en Gonnet.

Allí, debido a que Piparo se resistió a que le quitaran su cartera con el dinero que había retirado del banco para pagar el anticipo de la casa iba a comprar con su marido, López le habría disparado un balazo en la cara cuando estaba indefensa, en el piso, según la hipótesis que manejan los investigadores.

La mujer de López fue apresada casi al mismo tiempo que la esposa de Calvimonte y Burgos.

Al revisar su departamento del monoblock 9 del complejo habitacional conocido como La Favela, situado en 18 y 529, en La Plata, los investigadores encontraron una serie de recortes de diarios en los que figuraban artículos sobre los asaltos cometidos por la banda que supuestamente integraba su marido.

Según explicó la mujer, coleccionaba esos recortes por dos motivos. Los artículos periodísticos le servían para confrontar la suma de dinero que denunciaba la víctima ante la policía con la que realmente traía la banda. Además, usaba la información que aparecía en los diarios para verificar si se produjo un tiroteo, en caso de que tuviera que ir a buscar a su esposo a un hospital.

Al cierre de esta edición, Calvimonte y el hombre que "marcó" a Piparo cuando retiraba el dinero de la caja seguían prófugos y eran buscados por la policía.

En tanto, las dos mujeres y Burgos se negaron a declarar ante el fiscal Marcelo Romero y ante el juez de Garantías César Melazo.

El caso de Burgos es otro detalle que pone al descubierto la estructura familiar de la banda. Actualmente, su padre, Juan Carlos, está preso en el penal de Bahía Blanca, acusado de integrar una banda que se dedicaba a cometer salideras bancarias. En esa misma causa judicial, Calvimonte figura como coimputado.

El juez Melazo confirmó que si bien existe un sospechoso en la mira por haber señalado a la víctima, se investigaba si tenía relación con alguno de los empleados del banco.

Violentas salideras bancarias / Familias dedicadas al delitoCómo operaba la banda que atacó a la mujer embarazada en La Plata

La pareja de un ladrón controlaba, por los diarios, el botín denunciado en los robos; otro detenido

lanacion.com | Información general | Domingo 1 de agosto de 2010




Carolina Píparo soñaba con ser mamá y quería ser delegada de ATE
El jueves pasado recibió un balazo cuando fue asaltada por motochorros; está en estado crítico; su bebe, Isidro, está grave

Noticias de Información general: Martes 3 de agosto de 2010 | 01:13 (actualizado hace 2 días)
Ramiro Sagasti
De la corresponsalía de La Plata

LA PLATA.- Carolina Píparo aún no pudo alzar a su bebe, ni siquiera lo pudo tocar. Ambos están internados en el mismo hospital, el San Roque de Gonnet, de esta ciudad, pero ella sólo pudo ver a su hijo en fotos. Ella debía estar en esas imágenes, junto a Isidro y su esposo, Juan Ignacio Buzzali.

Pero no. Carolina no está en las fotos con su bebe. Los motochorros, además de pegarle un tiro y robarle sus ahorros, le quitaron el momento más importante de su vida. Eso ocurrió el jueves pasado, después de que Carolina sacara el dinero que habían ahorrado con Juan Ignacio para pagar, al día siguiente, el anticipo de su primera casa. Luego, el lunes o el martes, iba a nacer Isidro.

Las cosas no ocurrieron así. Además de pegarle un tiro para arrancarle la cartera con la plata, los motochorros le arrebataron a Carolina el que debía ser un recuerdo feliz: el nacimiento de su primer hijo. En su lugar pusieron otro, contaminado de esa angustia opresiva que provoca la incertidumbre: el estado de salud de Isidro continúa siendo crítico y el de ella, que estaba un poco mejor, se complicó en las últimas horas.

"Ambos están en un cuadro clínico con una recuperación lenta. Lo único que quiere Carolina es que todo esto pase", dijo Matías, su hermano. Y destacó la fuerza de voluntad de su hermana, que la va a ayudar a salir adelante. "Se la va a bancar", dijo.

Con esa fuerza de voluntad que remarcó Matías, Carolina y su marido trabajaron durante años para ahorrar el dinero con el que piensan comprar su primera casa. El es empleado de YPF. Ella, del Ministerio de Justicia y Seguridad bonaerense. Entró en 2005, cuando tomaron empleados para el número de emergencias policiales. Poco después, contaron compañeros de trabajo, fue despedida junto con otras personas que trabajaban en el 911.

No se quedó quieta, nunca lo hace, y la volvieron a tomar. Ahora trabaja en la oficina de personal civil de la mencionada cartera. "Es una maravilla de voluntad y decisión. Se iba a presentar como delegada", dijo Hugo Godoy, secretario general de ATE bonaerense.

Carolina tiene 34 años y pasó su infancia y adolescencia en Olavarria. Cuando terminó el colegio secundario, se instaló en la capital bonaerense para estudiar la carrera de asistente social en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).

Aquí conoció a Juan Ignacio. Se pusieron de novios y empezaron a proyectar la vida en pareja. Alquilaron una casa y se fueron a vivir juntos. Hace poco más de un año decidieron casarse y poco después, agrandar la familia, contó una tía de la víctima que vive en Olavarría.

Carolina y su hermano suelen viajar a Olavarría. Su padre, Lorenzo, y su abuela, viven allí, en la villa Fortabat, construída al lado de la cementera Loma Negra. A los hermanos les gusta volver a la casa en la que vivieron cuando eran niños y visitar a su abuela. "Los chicos tienen una relación muy afectiva con su abuela, que tiene 86 años", dijo la tía.

La madre de Carolina, María Ema, se había ido de Olavarria luego de separarse de su esposo y ahora se había instalado en La Plata para acompañar a su hija en el nacimiento de Isidro. María Ema estaba con Carolina ese jueves, cuando todos los planes de ella y su familia se derrumbaron. No, no se derrumbaron. Los derrumbaron los motochorros.

Carolina Píparo soñaba con ser mamá y quería ser delegada de ATE

El jueves pasado recibió un balazo cuando fue asaltada por motochorros; está en estado crítico; su bebe, Isidro, está grave

lanacion.com | Información general | Martes 3 de agosto de 2010



el dispreciau dice: asesinar un bebé no merece la más mínima consideración de nadie, no tiene nombre ni tampoco guarda posible calificación... el criterio de los "derechos humanos" para proteger a la delincuencia y sólo a ella, aparece como un camino demasiado imprudente sostenido por y desde la clase política, acostumbrada siempre a ir a contramano de la sociedad argentina. ¿Qué dirán ahora los ministros?... seguirán sosteniendo que la inseguridad es una mera "sensación"... ¿Qué dirá ahora el Gobernador Scioli?... sostendrá una vez más que él se ocupa en persona... y nadie podrá negarlo, salvo la realidad inapelable de un bebé asesinado a manos de delirios propios de bandas que indudablemente están protegidas por alguien con mucho poder, contribuyendo a proveer fondos para las cajas políticas, siempre hambrientas. El desmadre es significativo pero nadie se hace cargo, y si lo hace, revela que en muchos ángulos de la gestión, está atado de pies y manos tanto como sometido a los designios de aquellos que protegen a todo aquello que relacionado con el mal de una sociedad. A alguien le sirve. Más allá de los discursos, las justificaciones, las razones, los argumentos, las declaraciones, y las reacciones, la única verdad es que un bebé ha sido asesinado. La entidad financiera es decidamente culpable y responsable por lo ocurrido, así como el personal vinculado directamente a la tragedida, y desde luego los delincuentes que actuaron a sabiendas que estaban dirigidos y protegidos. Esto Señores, es una verdadera VERGÜENZA NACIONAL. Para nada diferente a la estafa a los jubilados a los que se les abonó sus retiros con dineros falsos en una burla urdida por las entidades financieras participantes y "alguien" que alienta estas actividades miserables que perjudican a la sociedad como un todo... Agosto 05, 2010.-

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